De Vuelta en América
Llevo menos de 24 horas aquí y ya me siento como en casa. Hace calor
y humedad y hoy amaneció nublado o con calima (mezcla de
contaminación y agüita, supongo), pero me levanté muy contenta.
Aún no tengo casa y hoy comenzaré a buscar, porque estoy deseando
instalarme cuanto antes. Lima parece una ciudad muy, muy ruidosa. Sin
embargo, tengo la impresión de que no es muy estresante.
La gente, como buena gente de mar, pasea por las calles, en lugar de
correr, como pasa en casi todas las ciudades.
Anoche cenamos en casa la cooperante de la Liga, que nos había ido a
buscar al aeropuerto. Es muy buena gente. Después quedé con
un amigo peruano que conocí en México y fuimos a dar una
vuelta por Miraflores. Es realmente bonito, aunque se nota que es muy
turístico.
El mar se ve bonito... el Pacíifico de alguna manera me imnotiza, y
ayer, de noche, con toda la ruidosa Lima a mis espaldas, conseguí
escuchar las olas y sentí paz.
Mi dermatitis creo que va a mejorar, por eso de estar cerca del
mar, pero por ahora me pican mucho los brazos.
Sobre el trabajo, estoy deseando ponerme manos a la obra. Hoy toca un
trabajo un poco más en casa, tengo que repasar los pormenores del
proyecto, pero por lo que dice Marta, trabajaremos mucho en contacto
con los Jóvenes de San Juan de Miraflores, uno de los "pueblos
nuevos" de Lima, y siento que voy poder aprender mucho
gracias a estar en contacto directo con ellos.
Chuso, esto está ahora en el boom inmobiliario. Parece que se está
reconstruyendo entera, así que si quieres, en mis ratos libres, me
dedico a ofrecer tus servicios...jeje.
Un beso a tod@s!!!
Karmela, la vida es maravillosa
No hay comentarios:
Publicar un comentario